La normativa europea actual obliga al etiquetado de todos los alimentos que contengan productos lácteos.

Es una de las alergias más comunes en niños y con el tiempo, al hacerse mayores, termina por desaparecer en la mayoría de los casos. Puede estar causada por cualquier tipo de leche animal, siendo la de vaca la que más alergias provoca.

Al igual que con el gluten, en la leche hay que diferenciar si el problema viene causado por una alergia, donde interviene el sistema inmunológico, es es una intolerancia a las proteinas de la leche o la lactosa.

Mientras que en la intolerancia los síntomas pueden ir de leves a moderados, incluyendo principalmente problemas digestivos como diarreas, hinchazón o gases, la alergia puede conllevar episodios de gravedad, incluso llegando a la anafilapsia. En tal caso, es indispensable recibir tratamiento médico de urgencia.

Como la leche es un ingrediente que está presente en muchos alimentos como un producto derivado de ésta, a continuación se detalla una lista de nombres que pueden indicar la presencia de lácteos: Leche de cabra, leche de oveja, leche de búfala, leche de yegua, leche de vaca, leche de camella, suero de leche de oveja, suero de leche de vaca, suero lácteo, cualquier queso, yogur, requesón, nata, leche entera, leche desnatada, leche no pasteurizada, leche sin lactosa, alfa-lactoalbúmina, beta-lactoglobulina, caseína, lactoferrina bovina, lactitol, lactosuero, caseinato de sodio, E4512, caseinato de calcio, E4511, caseinato de potasio, caseinato de magnesio, hidrolizado proteico, lactosa, lactalbúmina, lactoglobulina, lactosa, ácido láctico, E4511.