Alergias alimentarias
Las alergias alimentarias son una reacción del sistema inmunológico por el consumo de un determinado alimento. En una persona con alergia alimentaria, la respuesta inmunitaria es hipersensible, pudiendo desencadenar tanto síntomas de leves a moderados como graves. En casos extremos se puede llegar a la anafilaxis, que si no es tratada a tiempo puede poner en riesgo la vida.
En los países de la Unión Europea es obligatorio desde hace años informar de los posibles alérgenos que presentan los alimentos, envasados o no, que se sirven a los consumidores finales. Esta obligación atañe a 14 grupos de alimentos, pero no son los únicos que pueden ocasionar una reacción alérgena a las personas.
Ante la duda de si un alimento presenta en su composición algún alérgeno no declarado, siempre se deberá desecha y no consumirlo, ya que incluso una pequeña cantidad consumida puede desencadenar una reacción alérgena grave.
Intolerancias alimentarias
Las intolerancias alimentarias, a menudo confundidas con las alergias, son más comunes y sus síntomas no presentan mucha gravedad al no involucrar al sistema inmunitario.
Las intolerancias alimentarias más comunes, sin ser las únicas, son las relacionadas con el gluten, lactosa, fructosa e histaminas.
Los 14 alérgenos de obligada información a los consumidores finales, ya sea mostrándolos en el etiquetado de los productos envasados o por cualquier otro medio en el resto de productos, son los siguientes: